Vaigash

Parashá: VAIGASH

Fuente de la imagen: (*)

Título de la obra: “La emoción del encuentro”

Propuesta de versículos para los adultos: Bereshit (Génesis) 45:1-7 y 46:28-34

Personajes: Iosef, Iaacov, varios hermanos

Recursos: Un muñequito para cada personaje y animalitos

Resumen de la obra: Era un momento en el que no había teléfonos ni computadora. La comunicación era diferente que en el día de hoy. Tampoco tele tenían. Iosef vivía en Egipto, lejos de su familia. Como él había explicado el sueño del Faraon, vivieron siete años muy buenos, con mucha comida y muchos juguetes, pero ahora estaban viviendo momentos no tan buenos. La comida no era mucha y los juguetes tampoco.

Los hermanos de Iosef vivían en la tierra de Canaan. Como se habían quedado sin comida y sin juguetes, fueron a Egipto, donde vivía Iosef, en busca de comida y juguetes. Hacía mucho tiempo que no se veían ni hablaban. Como dijimos, no había teléfono. Ni siquiera por la computadora. El reencuentro fue muy emotivo. Todos lloraban de emoción. Iosef todavía no había visto a su padre que se había quedado en Canaan.

Entonces le dijo a sus hermanos “Tengo una idea! Vayan a buscar a papa y vivamos acá todos juntos hasta que pasen estos tiempos difíciles”. Y así fue que los hermanos fueron a buscar a Iaacov a la tierra de Canaan. El reencuentro realmente fue muy emotivo. Imagínense, hacía mucho que no se veían!”

Reencontrarse con la familia y poder jugar juntos siempre es muy emocionante! Mazal tov!

Moraleja: Reencontrarse con la familia y poder jugar juntos siempre es muy emocionante

(*):http://www.thebricktestament.com/genesis/josephs_brothers_in_egypt/gn42_06.html

Miketz

Parashá: MIKETZ

Fuente de la imagen: (*)

Titulo de la obra:  Ordenando nuestros días

Propuesta de versículos para los adultos: Bereshit (Génesis) 41:1-40

Personajes: Faraón, Iosef, jefe de los coperos,

Recursos: Un muñequito para cada personaje, animalitos grandes e animalitos chiquitos, platito con comida y platito sin comida (de los juguetes de cocina)

Resumen de la obra: Un día el Faraón se fue a acostar muy tarde porque había hecho una fiesta para sus amigos. Estaba tan cansado que se durmió en seguida. Esa noche tuvo dos sueños muy raros y cuando se levantó tenía una cara triste. Empezó a buscar por todos lados a alguien que le explicara su sueño. Buscó, buscó, miró para un lado y el otro….pero no encontró a nadie que supiera.  

Hasta que de pronto, asomó la cabeza y el jefe de los coperos le dijo: “Faraón, ahora que me acuerdo, Iosef sabe explicar los sueños. ¿Por qué no lo llamas a el?”.

“Que buena idea, lo voy a llamar!” – dijo el Faraón.

Cuando llegó, Iosef le dijo: “Buenas tardes, Faraón, por qué tenés cara triste?”

El Faraón le explicó: “Lo que pasa es que tuve unos sueños anoche y no los entiendo bien.  En el primer sueño había siete vacas muy gorditas, parecía que recién habían terminado de comer y otras siete vacas que eran muy flaquitas, hacían muuuu y tenían hambre. Tenían tanto hambre que una de las vaquitas flacas se comió a una de las gorditas. Pero no engordó. Raro el sueno, no? Esperá que te cuento el otro: había un plato con muuucha comida y otro que no tenía nada de nada. El plato que no tenía comida tenía hambre, entonces abrió la boca y se comió el plato con comida. Si, lo comió con plato y todo. Pero siguió vacío. 

Que te parece, Iosef?”

Iosef pensó y pensó y dijo: “Mira, los dos sueños nos cuentan lo mismo. Estos próximos siete años serán muy buenos. Tendremos mucha comida y muchos juguetes. Pero los otros siete años serán un poco más difíciles. No habrá tanta comida ni tendremos muchos juguetes.”

“Uy, que lio. ¿Y como hacemos?” – preguntó el Faraón

Iosef dijo: “Creo que lo mejor es poner a una persona que nos ayude a ordenar todas las cosas en estos años buenos. Así, cuando lleguen los años difíciles, ya vamos a tener todo ordenado y no van a ser tan difíciles.”

El Faraón dijo: “Creo que esta persona tenes que ser vos”

Y así fue que Iosef ayudó a ordenar las comidas y los juguetes en los años buenos.

Moraleja: Debemos siempre cuidar nuestra comida para poder comer cuando tenemos hambre. Debemos también cuidar nuestros juguetes hoy para seguir jugando mañana.

(*):http://midrashmanicures.com/2011/12/19/parashat-miketz/

Toldot

Parashá: TOLDOT

Fuente de la imagen: http://keterleisrael.wordpress.com/page/14/

Titulo de la obra: "Saber esperar"  

Propuesta de versículos para los adultos: Bereshit (Génesis) 25:19-34

Personajes: Itzjak, Rivka, Esav, Iaacov

Recursos: Un muñequito por cada personaje, animalitos que caza Esav, juguetes de cocina para el guiso de lentejas rojas

Resumen de la obra: Itzjak y Rivka se casaron. Luego del casamiento, ella quedó embarazada de dos bebes. Estaba muy panzona! Los bebes dentro de ella se movían mucho, cada uno quería ser el primero en salir. Cuentan que desde adentro de la panza se alegraban con distintas cosas, lo que ya desde temprano mostraba que eran muy diferentes el uno del otro. Al nacer, los dos salieron seguiditos; el que salió primero fue el que recibió el nombre de Esav y al que salió después lo llamaron Iaacov. En aquellos tiempos, el que había salido primero, recibía varios regalos cuando crecía.

Cuando crecieron, así como en la panza, tenían distintos gustos: a Esav le gustaba mucho estar al aire libre y cazar animalitos mientras que Iaacov era una persona muy estudiosa, educada y responsable.

Una mañana de sol, Esav aprovechó para salir a tomar aire, dar una vuelta por el campo y hacer lo que más le gustaba que era cazar animalitos. Mientras tanto, Iaacov, su hermano, quedó en casa, terminó de estudiar, se puso el delantal como los cocineros y empezó a hacer una rica comida. Los condimentos eran tan sabrosos que el olor empezó a llegar hasta el campo.

Ya era casi el medio día, hora de comer, y Esav estaba cansado de tanto cazar cuando empezó a sentir el rico olor que venía de su casa. Al entrar, le preguntó a Iaacov: “¿Qué preparaste para comer?”. A lo que Iaacov respondió: “Un calentito plato de lentejas. Si lo querés, yo te lo doy, pero pasaré a ser el más grande de los dos!”. Así fue que Esav aceptó el cambio y disfrutó su plato de lentejas.

Como Esav sabía que le faltaba mucho para ser grande y para recibir los regalos que recibía el hermano mayor, prefirió el plato de lentejas pues era algo que lo disfrutaría en ese mismo momento y no tendría que esperar.

Moraleja: Hay veces que debemos esperar para disfrutar después. 

Breishit

Parashá: Breishit

Fuente de la imagen: (*)

Título de la obra: El comienzo del comienzo

Propuesta de versículos para los adultos: Breishit (Génesis) Cap 1

Personajes: hombre y mujer

Recursos: animalitos, arbolitos, agua,

Resumen de la obra:

Era una vez un gran desorden. Además de desordenado, todo estaba a oscuras. Entonces Dios dijo: No se ve nada.... Que se haga la luz! Y se hizo la luz y él pudo ver y eso lo llamó día y a lo que era oscuro lo llamó noche.

Al día siguiente le pareció que hacía falta algo arriba, entonces creó el cielo y abajo quedo todo agua. Esto fue el día número dos.

Como todo se le mojaba porque era todo agua Dios puso todo el agua en un costado... a esta parte la llamó mar y a la parte que quedo seca la llamó tierra. En la tierra hizo que crecieran plantas y árboles. 

Esto fue el día número tres.

Sin embargo cuando miraba al cielo le parecía que faltaba algo... de noche y de mañana era exactamente igual, así que tuvo una luminosa idea creó a una gran pelota amarilla y calentita y la llamó Sol y de noche puso a un simpático personaje que a veces parece sonreír y la llamó luna y a su lado colocó las estrellas. Esto fue el día número cuatro.

Había mucho silencio y Dios empezó a aburrirse y tuvo una ruidosa idea, creó a los animalitos que vuelan como por ejemplo los pájaros y también a los del agua como por ejemplo los peces, caballito de mar, estrellas de mar y demás amiguitos que viven en el agua. Esto fue el día número cinco.

Pero Dios quería más ruido y más movimiento entonces creó las vacas, mosquitos, tigres, leones, jirafas, serpientes y demás animales grandes y animalitos pequeños. Ese día hubo mucho trabajo porque hizo algo más también. Dios creo al hombre y a la mujer y les dijo: Bienvenidos! Sean muy amigos y formen una gran familia! Esto fue el día número seis.

Uffff... Dios estaba muy cansado de toda la semana de trabajo, entonces él descansó e invitó al hombre y a la mujer a que ellos también descansaran e hicieran juntos el Shabat!

Moraleja: Cada nuevo día es una oportunidad para crear.

(*): Dibujo hecho por mamá Re y Shir explicando Breishit

Atzagat HaJag Sucot

Atzagat HaJag Sucot

Título de la obra: Construyendo la Suca

Personajes: Dos amigos

Recursos: Suca, hojas de árbol, escalera de juguete

Resumen de la obra:

Después de los primeros días del año, de Rosh HaShana y Iom Kipur donde mucho jugamos y escuchamos los sonidos del Shofar nos empezamos a preparar para la próxima fiesta. ¿Saben cuál es? Así es la fiesta de Sucot!

Así que los más agrandes agarran un martillo y clavos para empezar a construir la Suca.

Los más chiquitos ayudan a buscar todo lo necesario para poner en el techo de la Suca y decorarla. Es costumbre colocar en el techo hojas de palmeras para que podamos ver desde la Suca las estrellas y la hermosa luna llena que siempre nos visita en esta época.

Un año dos amigos estaban ayudando a armar la Suca. Se juntaron una tarde, merendaron para tener mucha energía e hicieron un montón de dibujos y guirnaldas para decorarla. Sólo faltaba el techo… no sabían dónde podían conseguir las hojas de palmera…

Uno de ellos tuvo una idea y dijo – Ya se!! Mi mamá siempre compra plantas en un vivero, voy a llamar ahí y les pido que nos traigan.

(ring, ring…) – Vivero, Buenas Tardes

-          Hola! Estoy necesitando hojas de palmeras, ustedes tienen?

-          No, acabamos de vender las últimas para armar una Suca… no tenemos más.

Los amigos quedaron un poco tristes, ya que no sabían dónde podían conseguir plantas de palmeras.

El otro amigo se acordó que muy cerca de la casa de su abuela hay una palmera… se podrían subir a una escalera y agarrar unas hojas. Genial! Dijeron juntos. Es una buena idea, manos a la obra.

Llegaron con la escalera que tomaron prestada de la casa de la abuela… pero se dieron cuenta que la Palmera era muuuuy alta y que con la escalera no llegarían… que desilusión.

A uno de los amigos se le ocurrió una idea.

Bien bajito, como hablándole al oído le dijo… señora Palmera, señora Palmera… Si, ¿Quién me llama?

Somos nosotros Señora Palmera… resulta que está empezando la fiesta de Sucot y necesitamos hojas lindas como las suyas para poder decorar el techo de nuestra Suca… necesitaríamos cinco… usted nos podría ayudar….

Pero claro! Para mi va a ser un honor estar presente en la Suca de ustedes en esta fiesta tan alegre. Hagan lugar que ahí bajo algunas hojas: 1, 2, 3, 4 y 5. ¿Está bien así? Perfecto! Muchas Gracias!! Nuestra Suca quedará preciosa!

Los amigos subieron con mucho cuidada a una escalera y colocaron las hojas en el techo de la Suca. Entraron en ella y cantaron juntos y con fuerza: Patish, Mazmer, Nikaj Maaer…

Moraleja: La Suca queda linda cuando la armamos entre todos

Pinjas

Parashá: Pinjas

Fuente de la imagen: (*)

Título de la obra: Pasando el mando

Propuesta de versículos para los adultos: Bemidvar (Números) Cap. 27: 12-23

Personajes: Moshé e Ioshua

Recursos: un muñequito para cada personaje, un bastón

Resumen de la obra:

Adulto (relator): Después de caminar muuuchos años por el desierto, Moshé estaba tan cansado que ya no tenía más fuerzas. Dios lo llamó y le dijo:

(Dios): ¡Moshé, Moshé!

(Moshé): Si, señor. Aquí estoy, como siempre.

(Dios): Veo que estas muy cansado, ya no sé cómo hacer. Quería mostrarte la tierra de Israel. Hagamos una cosa, subí a esa montaña, que es bien, bien alta, como un rascacielos, y desde allí podrás ver la tierra de Israel, a la cual de aquí a poquito tiempo el pueblo va a entrar.

(Moshé): Paaa….pero es altísima! Espero que haya ascensor….Bueno, voy subiendo, mientras tanto, te quería decir. Yo ya estoy muy grande y muy casado, ya no puedo caminar tan rápido como caminaba antes. Así que estaría bueno que este pueblo pudiera tener otro líder, otra persona que los pudiera dirigir en el camino.

(Dios): Que buena idea. Es importante porque cada uno tiene que hacer su parte y que después otros puedan continuar. Ese jovencito, Ioshua Bin Nun, siempre me gustó. Y al lado tuyo aprendió bastante.  Así que llámalo y les voy a decir cómo hacemos.

(Moshé, por teléfono): Ioshu, estoy acá hablando con él jefe y me dice que vengas un ratito.

(Ioshua, por teléfono): Pero justo ahora, que estoy jugando a la pelota con mis amigos….

(Moshé, por teléfono): A ver si entendés, el que te está llamando es el Kadosh Baruj Hu.

(Ioshua, por teléfono): Ah, bueno…hubieras empezado por ahí. Ya voy….

Adulto (relator): Ioshua llega hasta Moshé y los dos siguen exactamente las instrucciones de Dios para pasar el mando. Dios le dice a Moshé que coloque sus manos sobre la cabeza de Ioshua, que le haga una brajá como en la bendición de los hijos y que le entregue su bastón. De esta forma, Ioshua quedá como el sucesor de Moshé y Moshé le promete a Ioshua que mientras tenga un poquito de fuerza le iba a seguir mostrando todo lo que hacía falta para dirigir el pueblo. 

Moraleja: Es importante buscar ayuda cuando estamos muy cansados.

(*):http://www.tapuz.co.il/blog/net/Maavaron.aspx?entryId=2351160